Tras la intervención debe espera una semana para volver a su rutina habitual aunque el ejercicio físico debe esperar un poco más de tiempo, 2 o 3 semanas, dependiendo de las valoraciones de su médico.
Debe comenzar a introducir ejercicios de manera progresiva empezando por estiramientos leves, normalmente se recomienda la práctica de yoga o pilates en esta fase.
A partir de la tercera o cuarta semana ya puede comenzar el levantamiento de peso progresivo y actividades que requieran movimientos musculares de mayor amplitud. Comienzan a introducirse deportes de intensidad leve o moderada como bicicletas estáticas y ejercicios de pierna y abdomen.
Pasado el primer mes ya empieza a estar recuperado y puede comenzar el ejercicio físico más exigente, siempre con un sujetador deportivo adecuado, como running, step, zumba, byjump, etc.
Tras dos meses de recuperación ya puede comenzar a realizar ejercicios que requieran más grupos musculares y exigencia física como tenis, pádel, fútbol, baloncesto, natación, etc.
La natación es un deporte que debe valorar su médico el volver a retomar pasado el plazo indicado ya que puede suponer complicaciones en el proceso de cicatrización.
Los deportes de contacto no suponen un problema una vez recuperado el busto de las cicatrices de la operación ya que los implantes no se pueden dañar por recibir golpes.
Las sesiones de musculación y fitness deben aplazarse entre 4 y 5 semanas tras la operación y deben tener en cuenta las recomendaciones de su médico especialista para evitar roturas o desplazamientos de las prótesis. Normalmente para los pacientes que practican estos deportes con regularidad se aconsejan los implantes subfasciales o subglandulares.